-Escuchen esto:
estamos en un nuevo mundo,
donde casi nadie sabe sobrevivir-.
Y todos los que conocían esa nueva tierra se reunieron
y les enseñaron a sobrevivir.
-Nadie está a salvo,
pueden matarnos,
robar nuestra comida, nuestra casa
y dejarnos en la oscuridad de la noche sin nada.
Vayan a la luz,
porque la oscuridad es más peligrosa que el hambre-.
-Bajo la tierra, en todas las cuevas y minas
se esconden monstruos programados para matar,
y en la oscuridad de la noche también están-.
Vayan a la luz,
en la oscuridad se esconden los demonios
y la maldición de este mundo es que no nos deja morir.
-No se puede morir,
aunque salga siempre el sol, no hay mañana para nadie,
no hay progreso,
no se puede crecer;
cada vez que se muere, este mundo te devuelve a la vida
sin nada, ni nadie-.
Sin nada, ni nadie.
Este mundo te devuelve a la vida, en medio de la nada sin nadie
para que vuelvas a buscar todo.
Y lo terrible es que no hay fin.
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