Perdí las alas,
una vez
y allí me fui.
La vida,
el sentido,
mi sueño,
la esperanza,
y todo se fue.
Destrozada, en el piso
caminé,
buscando algo
y lo encontré.
Entre todo lo que perdí,
me encontré otra vez,
y caminé.
Creí encontrar lo que quería,
pero me perdí otra vez.
Recordando mi libertad perdida, lloré.
Pero logré ser libre otra vez.
Volví a volar como siempre,
con esperanzas.
Pero me perdí, otra vez.
Y esta vez
ya no hice nada.
¡ Y tan poco me importaba!
Que me conformé
y acepté ser olvidada,
otra vez.
Una aventura de no saber quien soy.
No sabiendo nada,
aprendí muchas cosas.
Valores y lecciones de vida.
Opciones a futuro,
posibilidades de vida para mi vida.
Pero no estaba ahí.
El camino me seguía llevando a perderme.
Y no sé qué quiero,
ni tampoco quién soy;
ni qué me hace ser,
o cómo llegué.
Y me siento forzada a responderme quién soy,
siempre que pasa esto.
Y no sé que quiero,
porque perdí todas las respuestas.
Perdí quién soy, y qué quiero.
- Dios te preparó toda la vida para esto-.
¿ Quizá?
Si estoy perdida,quizá pueda ser esto.
Quizá pueda tomarlo como respuesta.
Pero no soy una palabra cualquiera,
no;
y me encontré otra vez.
Quien soy es esto.
Lo que me hace
y lo que soy,
es esto;
es esta hoja de papel,
son estas palabras,
estas dudas escritas.
Me pierdo
y olvido
que soy un papel escrito;
El llanto,
la tristeza y alegría;
soy la vida y la muerte
escribiendo poesías,
escribiendo gritos,
escribiendo la vida.
Soy ésta que llora sus lágrimas
en un papel.
Soy esta que escribe.
Soy una escritora,
y escribo lágrimas;
las mías y las de todo el mundo.
Escribo el amor ajeno y propio.
Y cada palabra,
cada poema soy yo.
Esto soy,
un papel.
Muchas hojas que lloran
contando las penas con tal belleza
que inspira vivirlas y sentirlas así.
Esta soy yo,
este es mi don,
es mi regalo,
es mi trabajo,
es mi propio amor,
es mi pasión,
es lo que soy.
Un papel que dice
que vale la pena vivir;
que tengas el deseo de querer vivir.
Porque cada dolor,
cada pena,
cada llanto,
cada sentimiento bueno o malo,
cada culpa
vale la pena vivirlo.
Haz de tu vida algo hermoso;
Cada hoja de mi libro,
es mi vida;
y cada hoja de mi libro
es lo más hermoso.
Porque mi destino es no morir,
y vivir siempre.
Porque en cada hoja de mis libros
volverán a verme,
a sentirme viva.
Porque todo esto es mi vida,
mi destino es no morir.
Porque mi destino es no morir,
y vivir siempre.
Porque en cada hoja de mis libros
volverán a verme,
a sentirme viva.
Porque todo esto es mi vida,
mi destino es no morir.
Y en cuanto deba enfrentar a Dios,
le diré que todo lo que escribí,
lo hice con amor.
Que escribí con mi corazón,
y de corazón;
que en cada poema está mi corazón;
que cada poesía soy yo misma.
Que todo lo hecho,
lo amé
haciéndolo,
y leyéndolo
volví a amarlo más fuerte.
Porque eso es lo único que importa para Dios,
amar las cosas.
Cuánto amaste tu vida, en tu vida.
Y me volví a encontrar,
otra vez.
Y camino,
otra vez.
Y voy a volar,
esta vez.
Y voy a amar lo que escriba,
porque es el testimonio
de mi pasión por vivir.
Lo que puedo hacer
hacer bello el dolor,
hermosa a La Muerte,
y amarme más cada día.
Porque amo con todas mis fuerzas,
esto que puedo hacer.
Amo con todas mis fuerzas
esto que soy,
escritora.